En los encuentros de almuerzo hablábamos de hacer una actividad que nos sacara de la rutina pero siempre había un "pero" ¿Cómo? ¿Cuando? ¿Donde? preguntas que no lográbamos responder y nada encajaba con lo que queríamos... en mi mente seguía dando vueltas la idea de hacer algo.

Se me ocurrió la idea de practicar Yoga y empecé a buscar en Envigado donde llevarlo a cabo y que además se ajustara a mi jornada laboral; por medio de una asociada de la agencia conseguí el teléfono del lugar para  poder llevar a cabo mi objetivo, fui a la primera clase e inmediatamente me di cuenta que eso era lo que quería seguir haciendo. Al día siguiente le compartí a mi equipo de trabajo la experiencia vivida la noche anterior y todas inmediatamente me preguntaron acerca de la misma y por el interés que mostraron les propuse: ¿Qué tal si le preguntamos a la profe si viene y nos acompaña en una clase? Efectivamente en el mes de abril coordinamos con nuestra profesora una clase al medio día y desde este día,  dos veces por semana nos encontramos para nuestra clase de Yoga. 

 Con la práctica dedicamos un espacio para encontrarnos a nosotras mismas liberamos energías integramos mente, cuerpo y espíritu equilibramos nuestras emociones y trabajamos por nuestro bienestar, nos desligamos del estrés y de la cotidianidad.

Nuestra profesora, Carolina Correa, afirma: Veo que las chicas  son más flexibles y se sienten con más energía, esto es precisamente el objetivo de la práctica del Yoga, hacer una integración entre mente cuerpo y espíritu, desde que la mente este en calma y el cuerpo este fortalecido y flexible desencadenara en efectos positivos a nivel de salud física y mental. La práctica del yoga favorece la sinergia del equipo de trabajo y fortalece el ambiente laboral.

 Gracias a CONFIAR por apoyarnos en esta práctica que nos hace sentir mejor y es un complemento  para nuestro bienvivir.

Directora oficina Envigado